Crematorio y cambio de hábitos
La transformación de los hábitos funerarios en Pergamino es evidente. “La cantidad de cremaciones ha aumentado debido a un cambio cultural en los ritos funerarios.
“Anteriormente, los velatorios solían ser más largos y concurridos, para luego trasladar al difunto al Cementerio. Sin embargo, desde hace algunos años, las familias han optado cada vez más por velatorios más breves y la cremación. Tener nuestro propio horno crematorio hace que todo el proceso sea más fácil y rápido. Antes, el cuerpo debía ser trasladado a Junín, lo que alargaba el dolor de la familia por dos días más. Ahora, después del velorio, el traslado al crematorio es de solo 30 metros, lo que agiliza todo el procedimiento”, explicaron desde las salas velatorias.
Los datos de las Salas Velatorias
En cuanto a las cifras de cremaciones en los últimos años, el crecimiento es notable, en el año 2020 fueron 226 personas; en 2023 el número ascensión a 284; y el año pasado se llevaron a cabo 328 servicios de acuerdo a la proyección hecha hasta la fecha
Este aumento refleja no solo un cambio en las preferencias de la comunidad, sino también una mayor disponibilidad de servicios locales, lo que facilita una decisión que, hasta hace poco, implicaba largos traslados y complicaciones logísticas.
“El horno crematorio de la Cooperativa no solo representa un avance en la infraestructura local, sino también un reflejo del progreso y la adaptación de la sociedad pergaminense a nuevas formas de despedirse de sus seres queridos”, resaltaron.
Equipo de excelencia
En la entidad resaltaron que estos hornos crematorios de uso funerario son aparatos industriales capaces de alcanzar altas temperaturas. “Este tipo de equipamiento sirve para la cremación de cadáveres, técnica cada vez más utilizada, sustituyendo poco a poco a los tradicionales entierros de los cuerpos”, agregaron en las salas ubicadas en la esquina de calle Castelli y avenida Florencio Sánchez.
Desde el momento en que el Consejo de Administración dio por aprobada la inversión y puesta en funcionamiento del horno, los delegados pertenecientes a la Comisión de Servicios Sociales, estuvieron visitando diferentes ciudades donde ya opera la empresa que construyó el equipo que compró la Cooperativa Eléctrica. “Pudimos corroborar in situ que las chimeneas no desprenden ningún tipo de humo, ni olor, y están ubicadas a escasos 60 metros de la vida urbana. Estuvimos preguntando a distintos vecinos del cementerio, para saber si durante estos 15 años tuvieron algún tipo de problema o si sintieron algún olor, y todos concordaron con que no hay ni olor, ni humo, algo que resulta fundamental pensando en la ciudadanía”, reconocieron.
“La demora promedio de cremación es de 45 a 55 minutos y el tiempo de residencia de los gases en la cámara secundaria, poco mayor a dos segundos”, explicaron los técnicos que trabajan en la planificación. “Es un equipo apto para ser complementado con los equipos auxiliares de sistema de tratamiento y depuración de los gases emitidos, monitoreo continuo de los gases emitidos por chimenea y sistema computarizado para el control, recolección y registro de las variables del proceso”, se informó ayer.